El avión tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en el estado de Oregón tras perder luna ventana y parte del fuselaje en pleno vuelo.
Un avión de pasajeros de Alaska Airlines tuvo que aterrizar de emergencia en Oregón minutos después de iniciar su vuelo a California. En el avión viajaban 177 pasajeros, afortunadamente aterrizaron de forma segura.
La aerolínea informo que suspendería sus vuelos para inspeccionar sus 65 aviones y revisar que no tengan desperfectos. A pesar del caos que se pudo generar tras el desprendimiento del fuselaje, los pasajeros mantuvieron la calma y siguieron lo que la tripulación les indicó.
Uno de los pasajeros comentó lo siguiente: “Dijeron que había un niño en esa fila al que se le arrancó la camiseta que salió volando del avión, y que su madre lo estaba sujetando para asegurarse de que no se fuera con ella”.
Algunos usuarios hablaron sobre el tamaño del hueco que se generó comparándolo con el tamaño de un refrigerador. Además de comentar que el viento era extremadamente fuerte. El vuelo se encontraba a 4.876 m de altura cuando sucedió el accidente. Una de las pasajeras lo catalogó como “un viaje infernal”.