Desde el jueves 3 de abril, docentes de telesecundaria en San Luis Potosí iniciaron un paro de labores por tiempo indefinido ante la falta de respuesta a su exigencia de homologación salarial. Dejaron las aulas vacías y se trasladaron a las afueras de Palacio de Gobierno para continuar con sus protestas y retomar el diálogo con las autoridades educativas.
Más de 250 docentes se congregaron en el lugar, respaldados por el Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), bajo la representación de Manuel Arellano Méndez y el líder de la Sección 26, Juan Carlos Bárcenas. La principal exigencia del gremio es la homologación de salarios con otros niveles educativos, aunque la negociación enfrenta trabas legales.
Uno de los principales obstáculos es la situación de los docentes que han interpuesto demandas previas y recibido sentencias desfavorables, ya que, según las autoridades, no serían considerados para la homologación. No obstante, el sindicato ha dejado clara su postura: “No aceptaremos ninguna propuesta que excluya a algún compañero. El beneficio debe ser para todos”.
Además de la homologación, los docentes demandan la asignación de plazas para quienes obtuvieron los mejores resultados en evaluaciones, la contratación inmediata de maestros para grupos sin docentes, mejoras en seguros de vida e invalidez, el pago de adeudos en fondos de vivienda y retiro, y que no haya descuentos salariales por participar en manifestaciones.
Por su parte, la Secretaría de Educación de Gobierno del Estado (SEGE) reiteró su disposición al diálogo y aseguró que continúa gestionando la homologación salarial ante el Gobierno Federal. El secretario de Educación, Juan Carlos Torres Cedillo, afirmó que la administración estatal busca garantizar tanto los derechos laborales de los docentes como el acceso a la educación para los estudiantes, sin comprometer la estabilidad social del estado.