Irán y Estados Unidos retomaron este sábado su proceso de diálogo indirecto sobre el programa nuclear iraní, con una nueva ronda de negociaciones en Roma que fue calificada por ambas partes como “fructífera”. Las conversaciones, mediadas por el ministro de Asuntos Exteriores de Omán, Badr bin Hamad al Busaidi, se prolongaron durante unas cuatro horas y culminaron con el acuerdo de celebrar una reunión técnica en los próximos días, así como un nuevo encuentro entre los principales negociadores el próximo sábado.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ismail Baghaei, señaló en un mensaje publicado en la red X que el diálogo tuvo lugar en un “ambiente constructivo” y que Al Busaidi desempeñó un papel activo durante toda la jornada como canal de comunicación entre ambas delegaciones.
Por parte de Irán participó el ministro de Exteriores, Abás Araqchí, mientras que del lado estadounidense el interlocutor fue Steve Witkoff, enviado especial para Oriente Medio. Aunque no se revelaron mayores detalles sobre el contenido de las negociaciones, Baghaei reiteró que Teherán no contempla el desmantelamiento de su infraestructura nuclear.
“Preservar los recursos técnicos y nucleares de la República Islámica del Irán es una necesidad en este proceso”, declaró el funcionario a la televisión estatal, subrayando que una prioridad para su país es lograr que Washington levante las sanciones económicas “de manera segura y con garantías”.
Las posiciones entre ambas capitales siguen mostrando diferencias considerables. Irán insiste en que el diálogo debe centrarse únicamente en su capacidad nuclear, dejando fuera de la mesa su programa de misiles y su respaldo a grupos aliados en la región como los hutíes en Yemen y Hezbolá en Líbano. Estados Unidos, en cambio, plantea que el acuerdo debe abarcar también estas cuestiones, así como un desmantelamiento más amplio del programa nuclear iraní.