Con el estreno de la película “La Sociedad de la nieve” en Netflix, ha vuelto a tema de conversación la tragedia de los Andes, el accidente aéreo en el que se basó la película.
Por Paulina Vega
45 personas que viajaban de Uruguay a Chile quedaron varados tras estrellarse su avión en la Cordillera de los Andes en 1972. Solo 16 de los pasajeros sobrevivieron después de 72 días varados en las hostiles condiciones de las montañas de los Andes.
La mayoría de los pasajeros y de los sobrevivientes eran jóvenes en sus 20´s que se dirigían a Chile a un partido de Rugby. Y en ellos se basa la hoy popular película de Netflix “La Sociedad de la Nieve”.
Las condiciones meteorológicas no eran las mejores para realizar el vuelo, por lo que decidieron aterrizar en Argentina a espera de la mejora de condiciones, aunque no mejoraron decidieron despegar de igual manera y sobrevolar las montañas. Tanto el piloto como el copiloto pensaron que ya habían pasado las cumbres de los Andes y comenzaron a descender.
Pero estaban equivocados, al recuperar visibilidad se dieron cuenta que estaban a pocos metros de los picos de las montañas, finalmente, chocaron con uno de ellos, provocando que el avión se desplomara.
Si ya viste la película te preguntarás, ¿realmente comieron carne humana? La respuesta es si, después de muchos dilemas morales, discusiones y encontrándose en una situación desesperada de 10 días sin comer, finalmente decidieron comer parte de los cuerpos de sus compañeros fallecidos para poder sobrevivir.
“Fue un golpe brutal. Fue un shock enorme saber que, para vivir, tendría que alimentarme de amigos con los que había convivido hasta la semana pasada” mencionó en una entrevista el sobreviviente Antonio Vizintín.
¿Cómo sobrevivieron? Nando Parrado y Roberto Canessa, caminaron durante 10 días por las montañas en busca de alguna señal de civilización en las orillas de Chile. Un 12 de diciembre los dos jóvenes emprendieron el camino aprovechando el deshielo, atravesaron escalando los Andes, durmiendo en el frío extremo hasta que por fin, la salvación llegó.
Parrado y Canessa se encontraron con el vaquero Sergio Catalán, el fue el que llamó a las autoridades de Chile para auxiliar a los dos jóvenes y posteriormente ir a rescatar al resto de los supervivientes después de 72 días perdidos y dados por muertos en la Cordillera de los Andes.
Aunque a muchos les podrá parecer una decisión cuestionable, el comer la carne de sus compañeros fallecidos, fue un factor importante que ayudó a los supervivientes a llegar vivos después de 72 días en medio de temperaturas extremas y lejos de cualquier señal de vida. Además, en un punto, conforme iban enfermando, los mismos jóvenes les daban la autorización a sus amigos para comer sus restos.
Roberto Canessa es uno de los principales héroes, desde le momento del accidente auxilio a los heridos aprovechando su experiencia como médico. Además, él junto a Nando, fueron los primeros en sugerir alimentarse de los restos.
En entrevista con BCC Roberto mencionó:
“En aquella época, como futuro médico, veía carne, grasa, proteínas e hidratos de carbono. Me resultó muy difícil invadir la intimidad de mis amigos y cortarles una parte del cuerpo. Sólo había rocas y nieve alrededor. No había nada que comer y estábamos muy hambrientos.”
Sin duda es un milagro y un ejemplo de resistencia, fe y resiliencia la existencia de la historia de estos supervivientes. Actualmente algunos de ellos siguen con vida, formaron familias e incluso tienen nietos. Siguen contando su historia, siguen contando la forma en la que sus amigos y entre ellos lograron sobrevivir a lo impensable.
Y por si tenías curiosidad, en consecuencia del cambio climático, gran parte del terreno donde estuvieron varados, actualmente no tiene nieve, ahora son montañas secas con algo de vegetación, en el punto donde falleció la mayoría hay una cruz y placas memoriales para los fallecidos.